viernes, 18 de mayo de 2007

"Diles que no me maten"

"-¡Diles que no me maten, Justino! Anda, vete a decirles eso. Que por caridad. Así diles. Diles que lo hagan por caridad." Así comineza un cuento que releí hoy. No se si conocen a Juan Rulfo, un escritor mexicano. Tiene dos libros, "El Llano en llamas", un libro de cuentos y "Pedro Páramo". El cuento habla de una persona que ha sido condenada a muerte por el asesinato de su vecino a muchos años del crimen, ya siendo un viejo, que le pide a su hijo que hga nacer la compasión en el corazón de sus verdugos, quienes luego de buscarlo varios años, han dado con él. Este personaje vive escapando de la fuerza de la ley que busca ajusticiarlo durante toda su adultez. Esto hace que viva una historia que realmente no es vida y al final la pierda a manos de un coronel, hijo de su víctima.
Estaba pensando que como este hombre, muchas veces huímos de nuestro pasado, nuestros errores, viejas vivencias, antiguas amistades u otras cosas. Al final si uno escapa toda su vida, permanece con miedo a que "lo alcanze el coronel" y, en consecuencia pierde la libertad, ya no se puede vivir tranquilo. Es, en todo caso, tentadora la oferta de correr lejos y olvidar lo oscuro que hemos hecho o que nos han hecho. Pero de ningún modo puede ser proactiva para el fin de nuestras vidas. Creo que al final este post es una invitación a llamar a aquella persona que, por vergüenza no quiero llamar desde tal incidente, o a volver a tal lugar, escribirle u mail a tal grupo de gente o persona. Pienso que la libertad es un valor fundamental y es bueno medrarlo.

Pueden leer el cuento acá.

1 comentario:

Manuel dijo...

Sabes cuánto me gusta Juan Rulfo, un maestro indudable; por ese tema, no discuto. Sobre lo de la libertad, el coronel y todo aquel lío, creo firmemente que la realidad hay que enfrentarla, ganamos todos aunque muera alguien. Si la sobrevivencia o el "orden" van por sobre la verdad y la libertad, vamos a un agujero sin fondo; en ese sentido, los problemas deben afrontarse apenas se presente la oportunidad, para arreglar este mundo partiendo de nosotros y no del resto.

Algo así... ¿no?